Había una vez una red social que incorporó historias en su app e hizo florecer la creatividad. Así comienza la historia de Instagram cuando incorporó las stories a su plataforma, no solo los usuarios pudieron acceder a este servicio sino también las marcas. Y esta posibilidad, es sin duda, un recurso que no podemos dejar pasar.
Según nuestras estadísticas los usuarios le prestan más atención a las stories que a las publicaciones en el feed de Instagram. Es por eso que las comunicaciones de las marcas deben pasar por ahí pero ojo, su contenido tiene que ser creativo ya que con un solo toque de nuestro dedo lo omitimos completamente y pasamos a la siguiente página (o mejor dicho, story).
Pero ¿qué es una storie? Es un contenido (foto, video o texto) que se puede compartir en una sección de la aplicación y desaparece en 24 horas.
¿Y qué hago con eso? Bueno, podés hacer muchas cosas: informar, entretener, encuestar, interactuar. Todo depende del objetivo que persiga tu marca.
Por ejemplo, La Marchigiana busca interactuar con sus usuarios como si estuvieran en el restaurante. Te invitan a cocinar o te preguntan cuánto queso querés.
Kadabra, el vino mágico, intenta entretener con sus Horóscopos Mágicos. Busca que las personas se identifiquen y recuerden la marca.
Clos de los Siete mezcla dos funciones: enseñar y entretener. En las funciones muestra la composición de cada añada y utilizando el recurso de la encuesta le pregunta a sus usuarios curiosidades sobre el vino.
Ferruccio Soppelsa busca contenido generado por el usuario. Para comunicar una promoción de 2×1 en copas heladas compartió un template para que los usuarios crearan sus propias copas con los recursos que ofrece la plataforma.