Ya nadie se sorprende hoy en día cuando hablamos de E-commerce, lo escuchamos en la oficina, el gimnasio, y hasta en nuestros hogares, y casi con seguridad todos nosotros lo usamos en nuestra vida cotidiana. Esto es porque este sistema ya no es el futuro, sino el presente de las transacciones comerciales.
El comercio vía internet, hasta hace algunos años, era visto como un sistema complejo, en dónde cualquier compañía podía estafar a los consumidores, debido a la poca seguridad que existente en la confidencialidad de los datos de los usuarios.
Actualmente, las cosas han cambiado. Un estudio realizado por Visa, que estuvo a cargo de América Economía Intelligence, informó que en América Latina el comercio electrónico se mantiene como una opción efectiva a pesar del entorno de crisis financiera a nivel mundial. En dicho documento se informa que el comercio electrónico a consumidores (B2C) creció 39.2 por ciento durante 2009, llegando a 21 mil 775 millones de dólares en esta región.
Se espera que para el presente año se alcance un crecimiento de 27 %, lo que permitiría cerrar el 2010 con 28 mil millones de dólares en B2C (business to consumer).
Este crecimiento, a diferencia de lo que ocurrió en otros ámbitos económicos durante este periodo, se explica debido a que muchos de los factores que estimulan el comercio electrónico continúan en desarrollo, como la penetración de las computadoras y las conexiones de banda ancha que alcanzaron tasas de crecimiento de 20 y 15 % anual respectivamente.